Por: Redacción Sloveniacast | Foto: Ravi Kant, Pexels
Hoy se celebra el primer Día Nacional de Conmemoración de las víctimas de la violencia comunista en Eslovenia. Así lo decidió hace unos días el Gobierno de Janez Janša, que se basó en la norma civilizatoria de que los autores de actos violentos deben ser medidos con el mismo rasero. Como declaró el Gobierno el 12 de mayo, al proclamar este Día Nacional, la violencia comunista en el territorio de Eslovenia desde el verano de 1941 hasta enero de 1946 causó la muerte violenta de decenas de miles de civiles y prisioneros de guerra, y afectó a cientos de miles de eslovenos durante las décadas de gobierno comunista, con todas sus violaciones de los derechos humanos y las libertades.
La fecha elegida para la Fiesta Nacional fue el día en que, en 1942, 49 personas de etnia romaní y cuatro de nacionalidad eslovena fueron asesinadas por partisanos en el desfiladero de Iška. Entre las víctimas también se encontraban 24 niños.
El Gobierno subrayó que éste fue el primero de una serie de crímenes de guerra masivos cometidos por el movimiento partisano comunista contra grandes grupos de civiles eslovenos y, posteriormente, contra prisioneros de guerra. Añadió que estos crímenes alcanzaron su punto álgido tras el final de la guerra en la primavera de 1945, cuando más de 15.000 personas, o el 1% de la población eslovena, fueron asesinadas en cuestión de semanas. Además, decenas de miles de prisioneros de guerra y civiles de otras nacionalidades fueron asesinados durante este periodo.
Eslovenia ha pagado indemnizaciones simbólicas y ha reparado a algunos de los familiares de los asesinados, se han investigado y limpiado un buen número de fosas y lugares de enterramiento clandestinos. Sin embargo, el derecho a una tumba y a ser recordado aún no está universalmente reconocido para todas las víctimas de la Segunda Guerra Mundial y del terror comunista que la siguió, advierte el Gobierno.
La declaración del 17 de mayo como día nacional de conmemoración de las víctimas de la violencia comunista ha provocado reacciones encontradas. Robert Golob, presidente del Movimiento Libertad, escribió en respuesta que “evidentemente tendremos que celebrar el 9 de mayo, el Día de la Victoria, más a menudo para recordar cuál es la verdad”. El Partido Levica (Izquierda) considera que “con este movimiento los partidos de la derecha intentan confundir a la población en eternas luchas culturales y en eternas discusiones sobre 1945 y 1991, porque con ello ocultan que no tienen ningún interés en resolver los verdaderos problemas de hoy”.
Božo Repe, historiador y titular de la cátedra de historia contemporánea en el departamento de historia de la Facultad de Letras de la Universidad de Ljubljana, cree que la decisión del Gobierno saliente no consiste en conmemorar sinceramente ningún acontecimiento relacionado con las matanzas de la guerra. Repe acusa al gobierno saliente de una lucha ideológica con el pasado, que en realidad es un intento de desviar la atención de lo ocurrido en Eslovenia. El historiador Repe también cree que esta acción del Gobierno hará que sea aún menos esperanzador o más difícil llegar a un consenso sobre nuestro pasado.
Con información del Portal Multimedia de la Radiotelevisión de Eslovenia.